El uso de lectores de matrículas ayuda a los oficiales a resolver crímenes importantes, incluidos los robos de vehículos.
Los lectores están ubicados en algunas patrullas y en todo el condado en lugares no revelados. Leen las etiquetas de los automóviles que circulan y las comparan con una base de datos nacional sobre delitos. Mulligan dijo que la tecnología está sacando a criminales serios de las calles.
«En un lapso de cinco días, detuvimos unos cinco vehículos robados diferentes, y en esos vehículos robados creemos que muchos de ellos venían al condado de St. Johns para cometer robos debido a la metodología que estaban utilizando», explicó Mulligan.
Los lectores buscan criminales serios, no delincuentes de bajo nivel.
Desde que comenzó el programa piloto el año pasado, la tecnología LPR ha ayudado a encontrar delincuentes a nivel de delito y ponerlos tras las rejas. Ayudó a la Oficina del Sheriff a capturar a un sospechoso de homicidio de fuera del estado, un depredador sexual en serie y localizar numerosos vehículos robados, según los oficiales.
Debido al éxito de los lectores, la Oficina del Sheriff está empezando a desplegar más lectores de matrículas con la esperanza de atrapar a más delincuentes y mantener a salvo a la comunidad.
Mulligan dijo que la privacidad no es una preocupación porque los lectores solo ejecutan su etiqueta, no su información personal.